Sistemas de riego:

A la hora de aplicar los riegos en los cultivos debemos de tener en cuenta hay varios sistemas de riego:

• Riego por gravedad (más conocido como riego a manta): este tipo de riego consiste en abrir una compuerta de una acequia por la que circula el agua y dejar que la parcela se inunde. Este tipo de riego es el menos eficiente, ya que es el que más pérdidas de agua presenta tanto por escorrentía como por filtración (hasta un 90%). En la actualidad hay que concienciarse del ahorro del agua en la agricultura y llevar a la extinción este sistema de riego.
• Riego por aspersión: este tipo de riego consiste en generar una lluvia localizada sobre el cultivo. En el riego por aspersión se limita considerablemente con respecto al riego por gravedad, auque para conseguir un riego eficiente con este sistema hay que determinar con exactitud la distancia entre los aspersores, para tener un coeficiente de uniformidad superior al 80%.
• Riego por goteo: este sistema de riego es el que mejor optimiza el uso del agua. El agua se aplica de forma localizada en el suelo, generando un bulbo húmedo alrededor de las raíces de los cultivos, por lo que para evitar las pérdidas de agua por percolación el riego se programará a bajos volúmenes y con una alta frecuencia con respecto a los otros dos sistemas de riego comentados anteriormente.